Demasiadas repeticiones vuelven el músculo flácido

- Lo llevo todo, ¿no? Mira que como se me olvide algo sé que no van a parar la furgoneta y dar la vuelta, porque eso haría perder ritmo a la trama, salvo que fuera para salvarme de mí mismo o descubrir a mi mujer comprando otra marca de sirope.
- Vamos a repasar. ¿Granadas de mano?
- Sí.
- ¿Traje del mismo color que la camisa para después?
- Sí.
- ¿Pasado tormentoso con futuro prometedoramente limpio?
- Listo.
- Y tú picarón, y eso, unido a un sexappeal dentro de lo normal, harán de ti la nueva estrella de un hitazo con De Niro como secundario.
- ¿No bromeas, como Jordan cuando se pasó al Baseball?
- No bromeo, como cuando mamá dice que si no te lo comes lo tendrás de merienda y, si no, de cena y, si no, de resopón y, si no, de desayuno.
- Faltaría algo ligero a media mañana, pero me hago una idea, como los altomedievales del fin de la Tierra en una cascada.
- Bien. Pues hazte las flexiones de antes del atraco que recomienda Sportacus y que suene el temazo que te pones en Youtube mientras te preparas para salir de marcha.
- Me lo he metido en el iPod, aunque menos sexymente que Jessica Biel en Blade 3 y más que Jessica Biel en El Ilusionista.
- ¿Valía o no valía la pena dejar la escuela por la calle para pasar una temporada en la sombra por un crimen que no cometiste?
- La verdad es que no habría desarrollado el triceps posterior de no haber sido por Andrej, pero de ahí a hacer una segunda parte de Constantine hay un paso.
- Como la casa de Jessica Biel al gimnasio, que también está a un paso.
- Todos queremos a Jessica, salvo en Mujeres Desesperadas, que se mueren de celos.
- Te creeré porque tienes la voz grave y eso transmite confianza, especialmente bajo la bóveda de un buen bigote. Ahora ten tu AK y marcha, que el jardinero está a la que cae y me gusta acicalarme antes y después de que venga.
- Qué suerte tengo de no sospechar nada. Dame un pico delante del vecino, que me voy. ¡Qué pasa, artistas! ¿Saciando con aftersun la piel sedienta? Me recuerdas a mí de joven en la charca, cuando el cáncer era una cosa privada, como la religión en el norte de Europa, y lo rojo de hoy era lo moreno de mañana.
- Eso sigue siendo así.
- Mientes, pero no te lo tengo en cuenta porque el bote está ya lleno y nos vamos directitos a Aurgi a cambiar los neumáticos con ello. ¿Por qué habría de recurrir a mano de obra mediocualificada? Porque estoy haciendo más kilómetros que el Quijote de trajinar en las redes de un imperio que está por cimentar, pero que va a quedar muy mono. Y es por ello, y por discrepancias con mis administradores, que he faltado a mi comparecencia en el juicio contra la Campanario y tengo esto recogido pero lleno de polvo.
Os cuento: esto de ser autónomo me ha llevado a negociar por todas partes, lo que se entiende gran parte del territorio patrio, para el asunto de diseño gráfico que manejo. La cosa va bien y esperamos que vaya mejor, para juntar tanto dinero que pueda comprar el primer fotograma de Mickey Mouse o una estancia larga en el extranjero.
- ¿Y qué hay de la isla maléfica a la que le teníamos echado el ojo? Mira que les dije que me la reservaran y no quiero quedar mal.
- Nena, todo depende de cómo se dé la cosa.
- ¿Con más rabo que la pantera rosa?
- Y que el Diablo. Por eso anuncio mi retirada oficial de las canchas y mi incursión de la mano de un supersponsor en la música country. Gracias, gracias.
-¿Y lo de ir a Sevilla y Málaga próximamente?
- Ya que me ha quitado Antonio Banderas lo del pregón otro año más, sólo iré por trabajo y por placer.
- Sabes que esas cosas no te pasarían en Cambridge...

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