Lo sé, lo sé, y lo siento

- ¿Tú eres más Tomista que agustinista, no?
- Será tomasista o agostino.
- No te sigo.
- Es que has acortado el nombre para que te salga redondo y has incurrido en un acortamiento silábico sin precedentes, y no podía de callármelo.
- ¿Y qué me dices de “giro copernicano”? Está muy extendido.
- Ahí me has pillao, pero le pasa lo mismo. Se diría coperniciano o coperniquense.
- Ya… Oyes, ¿no te importa si te voy dejando? Es que hace un montonaco que no pongo nada en el blog y tengo al respetable alborotado y las medias de color.
- De color…
- Pues eso. ¡Qué pasa, artistas! Ha mucho tiempo que no entablábamos relación. ¿Amoríos de verano? No. ¿Escarceos con los estudios? Efectivamente y no. ¿Aventuras en las antípodas, donde se vive mejor haga frío o calor? Tampoco, tampoco. Y ya os descarto yo que haya sido por la propia construcción del “yo”, porque, aunque lo hago a diario, de ahí mi tipín de torero, no me quita tanto como para desatenderos de esta manera.
Este abandono, que casi me cuesta vuestra custodia, es producto de un cúmulo de cosas entre los que destacamos: ficticio secuestro de las FARC; mundiales de atletismo, Berlin 09; Leyendas de pasión, qué peliculón; trabajo, trabajo y más trabajo; el culto al cuerpo; y la más que notoria ausencia de mi musa.
Desde aquí quiero hacer un llamamiento a toda ella, porque me falta y no consigo reencauzar mi vida. Tanto es así que me arrojo a los brazos de otra nación que no es la mía y me alejo de ella, porque ¿qué más da tenerla a 30km que a 31? Pues a mí, como comprenderéis, me da igual. ¿O acaso existe alguna diferencia entre tener mucha hambre o mucha mucha hambre? Que conteste Lazarillo.
Cambio de tema. En el orden del día consta el punto del cambio de domicilio. Toda vez que hemos procedido según lo contenido en los estatutos y la ley, y pedido comida china entre tanto, se ha acordado que me mudo al Barrio del Pilar, pero en la zona buena, esto es, de la avda. de la Ilustración para arriba. Es piso compartido y apenas estaré ahí un mes, porque el 1 de octubre marcho a las germanias. Allí sí que aspiro a estudio/loft/suite individual. Estamos trabajando en, para y por ello.
¿Los motivos son cosa trivial? Bueno, a ver, tampoco hay que darse esos aires. Me mudo durante un mes, entre otras cosas, como ensayo de la que se me viene. Pretendo estar igual de fetén de lo que estaba, pero con más libertad y más ratos para mirar por la ventana mientras llueve y humea un cigarro que se consume poco a poco, como mi existencia.
Por todo y por ello quiero que reflexionéis a cerca del papel que habéis tenido en mi muda, que, como la serpiente de cascarón, yo lo he hecho de paredes. ¿Hasta qué punto ha influido en la marcha del muchacho? ¿Debí regalarle algo pensao por su cumple, y no asaltar el Vips y el Opencor, porque no era primer domingo de mes y no tenía yo cuerpo para bajarme a la otrora Galerías Preciados? ¿Es Lost tan buena como dicen? Y lo más importante: ¿hubo Noé de meter una pareja de animales acuáticos, o, como su medio natural no peligraba, tuvo espacio para meter la mesa camilla en su lugar?