¿Y estas fotos? ¿Cómo es que no he hecho un remember guapísimo con la de tiempo que me deja el proyecto de fin de carrera, máxime desde que me he ido a London a acabarlo para perfeccionar mi inglés? Eso me recuerda que tengo que quedar con Laura, Mariajo y los demás para comer, que la hora de los autóctonos ya se me ha pasado.
- Pero si son las... es verdad, porque la española cuando besa, besa de verdad.
¡Qué pasa, artistas! ¿Esperando a tener más ropa blanca para poner la lavadora? Es normal, como que papá se casase otra vez al poquísimo de firmar el divorcio, o que las casas que enseñan en "¿quién vive ahí?" sean todas una horterada. Hoy os escribo contrayendo el biceps para alborotar a las nenas y con la actitud serena de un vino macerado durante ya casi 26 años.
- ¡Qué temple, qué lustre, qué empaque, qué fistro!
- Ay, Dulcinea, cómo me pones y qué bien me das de comer. Como os decía, un puñado es más que un pellizco en hostelería, y esta semana se pone en marcha la maquinaria del partido, pues nos disponemos a trasladar el domicilio social, con la consiguiente tasa de gestión con 3 decimales. Todo lo que tengo no cabe en una caja, pero todo lo que quiero tiene sitio de sobra en mi cama. Y antes de que agotéis el carrete en el tramo del restaurant al hotel dejadme que os diga que esto será lo serio que ella quiera y lo largo que el destino permita, porque mi paz interior, tan bien decorada por un diseñador de interiores heterosexual, necesita el repunte de un poquito de asueto combinado con actividades varias, como los idiomas y el trabajo. ¿Qué trabajo? ¿Qué quieres ser? ¿Qué hay de cierto en lo de Adriana Lima? Que coma un poquito esa chiquilla y que no sean Bicenturi. Respecto a lo de que qué quiero ser no se revelará hasta el final de la 3ª temporada, y seguramente os deje to locos, pero asintáis que eso es lo mío, porque si no lo hago yo, ¿quién? ¿Anne Igartiburu? Déjala que repose, hombre, que tiene sensibilidad dental.
Por mi parte, puedes quedarte con la casa de la tía Doris, que no quiero ahondar en el conflicto familiar que tanto daño ha hecho al Luismi, tan sensible como promiscuo.
- Entonces, ¿irás o no a la compra esta semana?
- Pues mira, querido espontáneo perfectamente maquillado, como soy fan del último superviviente, que en inglés se dice Bear Grills, pues me apañaré con lo que tengo, que ello despierta mi creatividad, cosa que se refleja en la colección de camisetas de esta temporada de primavera-verano que comienza... ¡ahora! ¿Qué os parece? Dejad vuestras opiniones en el contestador del programa o bien por email a la dirección que aparece debajo del escote de Anna Simón.
- ¿No vas a saludar a tu público en Francia?
- ¿Y que les de un poquito de calor en el corazón?
- No te olvides de los posibles celos de los yakuza, que en Japón también te siguen.
- Me persiguen, que no es lo mismo.
- Tranquilo, todo acabará cuando se pare la música.
- Bien. Un besito para esas españolas por la Francia.
- Pero si son las... es verdad, porque la española cuando besa, besa de verdad.
¡Qué pasa, artistas! ¿Esperando a tener más ropa blanca para poner la lavadora? Es normal, como que papá se casase otra vez al poquísimo de firmar el divorcio, o que las casas que enseñan en "¿quién vive ahí?" sean todas una horterada. Hoy os escribo contrayendo el biceps para alborotar a las nenas y con la actitud serena de un vino macerado durante ya casi 26 años.
- ¡Qué temple, qué lustre, qué empaque, qué fistro!
- Ay, Dulcinea, cómo me pones y qué bien me das de comer. Como os decía, un puñado es más que un pellizco en hostelería, y esta semana se pone en marcha la maquinaria del partido, pues nos disponemos a trasladar el domicilio social, con la consiguiente tasa de gestión con 3 decimales. Todo lo que tengo no cabe en una caja, pero todo lo que quiero tiene sitio de sobra en mi cama. Y antes de que agotéis el carrete en el tramo del restaurant al hotel dejadme que os diga que esto será lo serio que ella quiera y lo largo que el destino permita, porque mi paz interior, tan bien decorada por un diseñador de interiores heterosexual, necesita el repunte de un poquito de asueto combinado con actividades varias, como los idiomas y el trabajo. ¿Qué trabajo? ¿Qué quieres ser? ¿Qué hay de cierto en lo de Adriana Lima? Que coma un poquito esa chiquilla y que no sean Bicenturi. Respecto a lo de que qué quiero ser no se revelará hasta el final de la 3ª temporada, y seguramente os deje to locos, pero asintáis que eso es lo mío, porque si no lo hago yo, ¿quién? ¿Anne Igartiburu? Déjala que repose, hombre, que tiene sensibilidad dental.
Por mi parte, puedes quedarte con la casa de la tía Doris, que no quiero ahondar en el conflicto familiar que tanto daño ha hecho al Luismi, tan sensible como promiscuo.
- Entonces, ¿irás o no a la compra esta semana?
- Pues mira, querido espontáneo perfectamente maquillado, como soy fan del último superviviente, que en inglés se dice Bear Grills, pues me apañaré con lo que tengo, que ello despierta mi creatividad, cosa que se refleja en la colección de camisetas de esta temporada de primavera-verano que comienza... ¡ahora! ¿Qué os parece? Dejad vuestras opiniones en el contestador del programa o bien por email a la dirección que aparece debajo del escote de Anna Simón.
- ¿No vas a saludar a tu público en Francia?
- ¿Y que les de un poquito de calor en el corazón?
- No te olvides de los posibles celos de los yakuza, que en Japón también te siguen.
- Me persiguen, que no es lo mismo.
- Tranquilo, todo acabará cuando se pare la música.
- Bien. Un besito para esas españolas por la Francia.
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